REFORMA, Chiapas. Diciembre 20.-Montan operativo de revisión, militares y policías estatales y protección civil en polvorín donde se localizan puestos de venta de tronadores de esta ciudad.
El operativo fue encabezado por Francisco Velasco Cantoral Delegado de Protección Civil
La finalidad de la revisión que realizaron las fuerzas conjuntas, dijo el coordinador regional de protección civil, Francisco Velasco Cantoral y el coordinador municipal, Javier Maldonado Tolentino, es para que los doce locales establecidos en el tramo carretero Reforma-Boca de limón, en el predio San Francisco de la ranchería Vicente Guerrero, cumplan las medidas de seguridad que marca el código estatal y federal de juegos pirotécnicos.
Así uno a uno de los locales con venta de tronadores fueron revisados por parte de PC y la documentación y permisos de los dueños de los puestos fueron cotejados por el teniente de infantería de la 37 zona militar, Dagoberto Carrasco Castellanos.
Durante la revisión se exigió a la representante de los vende cohetes, Isabel Beltrán Hernández que todos contaran con extinguidores en buen estado, tanques de arena, agua, palas y picos que puedan ser usados en casos de algún incendio u otro tipo de incidente.
Se verificó que tuvieran lo necesario para en caso de un incendio
También se ordenó el retiro de material explosivo excedente de los 10 kilos que en dos los locales estaban almacenados y que sobrepasaban el monto que permiten las leyes federales.
Además las autoridades detectaron que varias camionetas cerradas que estaban detrás de los locales estacionados, contenían en su interior más kilos de tronadores, por lo que también se ordenó su retiro del lugar hacia el polvorín que tienen los dueños de los locales en la ranchería zapotal segunda sección de este municipio.
El delegado de Protección Civil platico con los expendedores de Cohetes.
Finalmente el coordinador regional de protección civil, Francisco Velasco Cantoral advirtió que esta visita había sido de manera preventiva e informativa para que corrigieran las anomalías, pero que la próxima revisión-cuya fecha no preciso-se hará con el ministerio público federal e implicaría decomisos de su producto y hasta la cancelación de permisos si detectan de nuevo irregularidades en sus locales.