EL DOMINGO
Javier Solorzano
Además de la presentación del proyecto de reforma energética de López Obrador, el domingo en la mañana en el Zócalo, muy probablemente hacia la noche la presidencia dará a conocer su propuesta de reforma fiscal. Las razones de López Obrador de su sistemática crítica y aislamiento de las instituciones políticas tienen mucho de razón. El gran dilema va a ser de nuevo si se queda en el pasado o le da vuelta a la página, cuestión nada fácil desde cualquier punto de vista. El dilema es también si se aboca a entrar en una etapa de integración, negociación e intercambio de opiniones y decisiones sin dejar ni por asomo sus principios, los cuales lo han hecho al mismo tiempo controvertido y admirable, o de nuevo se aísla.
La desconfianza de AMLO no es casual más bien tiene bases más que fundadas. Dos elecciones controvertidas, una de ellas pudo ser suya, intentos de desafuero, campañas negativas en los medios, por mencionar lo que esta en la memora colectiva han sido definitivas en la formación del tabasqueño.
La desconfianza de AMLO no es casual más bien tiene bases más que fundadas. Dos elecciones controvertidas, una de ellas pudo ser suya, intentos de desafuero, campañas negativas en los medios, por mencionar lo que esta en la memora colectiva han sido definitivas en la formación del tabasqueño.
Lo que viene ahora debe colocar a López Obrador y sus huestes bajo nuevas estrategias. Por más que en las pasadas elecciones hayan logrado sumar votos y expectativas no puede seguir confiando solo en ello. López Obrador es un personaje que ve muy bien los escenarios, es lo que se conoce como un animal político, pero tiende a verse poco o nada asimismo, hace ver p que los problemas están fuera de él y su entorno. Si logra el domingo lanzar un discurso incluyente y de propuestas podrá meterse de nuevo en la memoria colectiva, pero si lo que quiere es usar la reforma energética para lanzar a Morena volveremos a lo de antes ante una sociedad que ya no es la de antes.